Con la actividad tecnológica en Observación de la Tierra ralentizada en medio mundo, es un buen momento para pensar en nuevas propuestas o desarrollar viejas ideas que nunca había tiempo de considerar. Por eso es un buen momento para el Copernicus Masters 2020 que, precisamente, se acaba de abrir.

Esta competición ya clásica, de la que tenéis toda la información en https://copernicus-masters.com, espera proyectos innovadores que promuevan o faciliten el uso de los datos de Copernicus en aplicaciones comerciales o para la sociedad. El plazo para participar está abierto hasta el 30 de junio.

El Copernicus Masters tiene un premio global y varios retos particulares, propuestos por entidades colaboradoras del concurso. En el lado más tecnológico, este año la ESA promociona un reto particular: ESA Digital Twin Earth (DTE) Challenge. Con este reto la ESA busca estimular desarrollos en tecnologías de la información que combinen inteligencia artificial y Big Data (sea de los Sentinel o de otras misiones de Observación de la Tierra) para estudiar y pronosticar el impacto del cambio climático en la sociedad. Tanto el concurso Copernicus Masters global como los retos particulares tienen premios en metálico, y otros relacionados con el acceso a datos o el soporte para la puesta en marcha de las ideas presentadas.

En 2017, colegas de la Universitat Politècnica de Catalunya fueron los ganadores tanto del premio absoluto como del reto ESA, con su propuesta FSSCat. Se trata de dos nanosatélites federados con una carga útil destinada a medir humedad del suelo y cartografiar áreas cubiertas de hielo, con el propósito específico de proporcionar datos para los servicios Copernicus. Además, la ESA complementó FSSCat con un proyecto pionero de inteligencia artificial, PhiSat, del que hablaremos otro día, lo que refuerza la trascendencia del proyecto.

FSScat / PhiSat está ya listo para ser lanzado como una carga complementaria de Vega, a la espera, solamente, de que se reanuden los lanzamientos tras la crisis del Covid-19.