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Todo el sistema de proceso, archivo y distribución de imágenes de los satélites Sentinel va a completar este año 2022 una transición muy compleja pero, afortunadamente, transparente para los usuarios. En esta presentación de la ESA podéis encontrar antecedentes y detallada información técnica (un poco difícil de seguir) sobre este proceso.
En términos generales, se trata de racionalizar y modernizar el sistema ante la evolución tecnológica del sector TIC y la enorme complejidad y volumen que está alcanzando el conjunto de datos Copernicus. La figura que adjuntamos, tomada de la presentación, muestra cómo quedan ahora los grandes bloques del ESA Sentinel Ground Segment.
Esta presentación se hizo el pasado mes de octubre en el marco de la edición 2021 del Collaborative Ground Segment Workshop. En este taller, los centros colaborativos nacionales del segmento terreno Sentinel (CollGS) reciben actualizaciones de la ESA (como la que aquí recogemos) y a su vez muestran su estado y planes de futuro.
Como hemos presentado en varias ocasiones, también en este blog, el INTA y el IGN han trabajado durante años para que España tuviera su propio CollGS. Un centro así permitiría a España un punto extra de acceso a imágenes Sentinel adaptado a las necesidades de usuarios nacionales y, más importante aun, un entorno favorable y el empuje necesario para el desarrollo de nuevos productos con imágenes Sentinel por entidades públicas o privadas españolas. Lamentablemente, este centro no ha podido salir adelante de momento. Hay varias razones, pero todas ellas derivadas de un hecho fundamental: ningún órgano de la administración central con responsabilidades en este tema ha querido financiar esta iniciativa.
Por cierto, en la documentación del taller también encontraréis una revisión del estado de los Sentinel, que en ese momento era impecable. Apenas dos meses después, y como quizás sabréis, nos enfrentamos al primer fallo importante en un satélite Copernicus: Sentinel-1B no puede trasmitir imágenes desde el 23 de diciembre debido a un fallo del sistema de potencia. La ESA sigue trabajando en resolver esta grave anomalía técnica, pero actualmente (aquí la última actualización) no hay garantías de recuperar el funcionamiento de Sentinel-1B.